A la hora de comprar cajas fuertes es importante tener en cuenta los variados modelos que existen, sus características y diferencias. Así, podrás elegir la que más se adapte a tus necesidades.
Tipos de cajas Fuertes según su instalación
En primer lugar, hay que distinguir entre:
1. Para empotrar: son las más conocidas por la seguridad que ofrecen. Es muy difícil abrirlas sin llave y, además, son prácticamente imposibles de mover debido a su peso.
2. De sobremesa: su peso elevado impide que pueda trasladarse con facilidad. Además, son mucho más sencillas que las empotradas y disponen de múltiples diseños. Pueden situarse en lugares como suelos, mesas o armarios.
3. Camufladas o decorativas: las primeras ofrecen alta seguridad debido a su diseño y son ideales para oficinas. A su vez, las decorativas llaman la atención por su capacidad para integrarse en el diseño de una sala. Este modelo es muy fácil de instalar.
4. Ignífuas: dependiendo del objeto a preservar, habrá que elegir algún tipo u otro, el más adecuado para el papel es el que puede soportar 170º y los 52º para aparatos electrónicos. Puede soportar directamente las llamas durante largo tiempo.
5. Alta seguridad: imposible de abrir sin la clave correcta. Es el modelo que mayor seguridad y eficacia ofrece.
Asimismo, hay que tener en cuenta que no existe un límite de combinaciones, por lo que es muy difícil abrir una caja fuerte sin la clave. Por ello, para averiguar el número debe realizarse un complicado cálculo: multiplicar los 30 números de dos ruedas y luego por los 30 de la última. Más complejo es si tiene cuatro ruedas o si, además, cuenta con letras y números o una llave. Es prácticamente imposible averiguar la combinación correcta sin conocerla previamente.
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