Puertas cortafuego: la mejor forma de bloquear un incendio
Seguramente recuerdes el incendio que en septiembre de 2018 arrasó el Museo Nacional de Brasil, en Río de Janeiro. La falta de medidas antincendios como puertas cortafuego y el mal mantenimiento del museo causaron una auténtica tragedia. El mueso contaba con más de 20 millones de piezas, desde momias egipcias a la mayor colección indígena o la principal biblioteca de antropología de Brasil, y parte de la colección fue devorada por las llamas. Para evitar estos desastres, además de instalar los mecanismos necesarios hay que ocuparse del mantenimiento de puertas cortafuego.
Puertas cortafuegos, un elemento clave para evitar que se propague un incendio
Evitar incendios con puertas cortafuego
Tanto en museos como en otros edificios, es necesario tomar las medidas adecuadas para evitar la propagación del fuego, y las puertas cortafuego son una de las mejores opciones. Pero el diseño de las salas también ayuda. Por ejemplo, en el Thyssen-Bornemisza han prescindido de cortinas, moquetas o tapices bordados, elementos propagadores del fuego, en la decoración de las salas. También se han pintado las salas con pinturas ignífugas, una forma más de proteger las obras de arte.
Cortafuegos en las salas
A todos estos elementos de precaución hay que añadir el diseño de cortafuegos en las salas, gracias a las puertas, y de itinerarios de evacuación para los visitantes y empleados del museo... y para las obras de arte. En el caso del Museo Nacional de Brasil la suerte quiso que el centro cerrase las puertas unos minutos antes de que se declarase el fuego, de modo que no hubo que lamentar ningún daño personal, pero el riesgo estaba ahí. Por eso, no debemos pasar por alto la planificación antincendios a la hora de diseñar cualquier edificio.
